¿Cuánta tristeza falta sangrar hasta secarme?
podría adelantarme y cerrar los ojos
o seguir caminando descalza sobre vidas rotas
o quizás pueda hacer alguna otra cosa,
pero todavía no se me ocurre.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Un espacio para que lo que aparece, no desaparezca en la fugacidad.
La pena, y a borbotones....
ResponderBorrarSaludos para ti...
Agustín
...la tristeza nunca deja de drenar, no se agota...
ResponderBorrarComo siempre, estremeces Ale ;)
La tristeza es un manatial insaciable...
ResponderBorrarme gusta como expresas los sentimientos. me gustaría tener el mismo poder para hacer lo mismo con los míos que los tengo tan atorados, sobre todo en estos días y mis dedos se sienten mutilados porque no saben qué decir.
ResponderBorrarY en ese caminar descalzo hay tantos vidrios rotos, tantos que al parecer a uno no se le ocurre otra cosa que esquivarlos.
ResponderBorrarSentida esta brevedad de tus versos Alejandra.
Cariños
lo que dure una vida...
ResponderBorrarme gusta mucho como escribes
saludos
hannibal
creas espacios, lugares, habitaciones hechas de tiempo.
ResponderBorraradmirable.